Su trabajo y dedicación la convirtieron en la primera presidenta del comité cafetero municipal de San Antonio (Tolima). Ella contó su historia en la sede de Naciones Unidas en Nueva York .
| El primer biodigestor del Tolima lo creó una cultivadora de café, a partir de las heces de cerdos. | Por: Cortesía Bancamía
Perseverancia y resiliencia son dos de las cualidades que mejor definen a Sandra Mendoza. Su derrota en la primera postulación al cargo de presidenta del Comité Cafetero Municipal de San Antonio (Tolima) y la oposición de su esposo para que ocupara ese puesto, no le arrebataron su ilusión. Al contrario, le dieron el impulso necesario para que ella avanzara en este y otros proyectos profesionales. Hoy es un ejemplo para el mundo.
Su vida siempre ha transcurrido en la vereda Cristalina del corregimiento de San Antonio. Allí heredó de su padre una finca cafetera y desde los 18 años se ha dedicado al cultivo de este grano. Su rol de esposa y madre no le ha impedido luchar por sus sueños y criar a sus tres hijos: Jimmy, de 26 años, quien ya es ingeniero de sistemas; Claudy Tatiana, estilista, de 19 años; y Julián, de 9 años, quien está en el colegio.
En el foro ‘Mujeres protagonistas del cambio’, de la ONU, Sandra contó cómo adaptó su capacidad de liderazgo para mostrarle a su comunidad que el café transforma vidas. © Cortesía Bancamía
Sandra siempre buscó alternativas para mejorar la productividad en los cultivos de su finca, por eso realizó un curso en Salud y Bienestar Rural para implementar formas de generar ingresos en el campo a bajo costo. Sus estudios pronto le abrieron la mente hacia otras posibilidades y así adaptó su capacidad de liderazgo para mostrarle a su comunidad que el café transforma vidas.
Este trabajo la impulsó para postularse como presidenta del Comité Cafetero Municipal de San Antonio y, aunque en su primera aspiración al cargo fue derrotada, en la segunda ganó y se convirtió en la primera mujer al mando de esta organización. Tiempo después creó la Asociación de Mujeres Cafeteras de San Antonio.
Al evento en la ONU asistió la vicepresidenta de la República, Marta Lucía Ramírez. © Cortesía Bancamía
Más allá de su vinculación al sector cafetero, Sandra Mendoza, de 46 años, también ha incursionado en otros emprendimientos que la llevaron a crear una microempresa. Es la primera en poner en marcha un biodigestor en su departamento, un aparato que aprovecha los desperdicios y los convierte en energía renovable a bajo costo. Este proyecto lo realizó con el apoyo del programa Medidas de Adaptación al Cambio Climático (Meba), de Bancamía
A través de la crianza de cerdos y del aprovechamiento de sus heces se puede producir fuego en una estufa y además se tiene la posibilidad de generar luz. Esta nueva iniciativa de energía no contaminante permitió que Sandra y otras familias dejaran de cocinar con leña, la cual, además de acabar con los árboles, es perjudicial para la salud.
Sandra quiere instalar páneles solares para el secado de café. Su trabajo y dedicación la llevaron el pasado 13 de marzo a contar su historia de vida en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, en el foro ‘Mujeres protagonistas del cambio: cómo la inclusión financiera y la transformación digital pueden acelerar la igualdad de género y el desarrollo sostenible’.
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