Estas cinco iniciativas de turismo comunitario lo conectarán con la naturaleza, al tiempo que apoya a los territorios más afectados por el aislamiento.
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Desde el Caribe hasta el Amazonas, pasando por los Andes y la Orinoquía, los 52 destinos de turismo comunitario a lo largo de Colombia empiezan a reabrir sus puertas a visitantes de todas partes del país.
Comprometidos con fortalecer la competitividad y el emprendimiento de la población rural, campesina, indígena, mestiza y afrodescendiente, la Red Nacional de Turismo Comunitario apuesta por experiencias para “conectarse nuevamente con la tierra” y generar procesos de restauración física y mental después del confinamiento.
Beneficiando a 30 familias por iniciativa (cerca de 4.680 personas) este tipo de turismo busca mejorar la calidad de vida y el entendimiento entre las comunidades. Así como crear una alternativa productiva que proteja el medio ambiente y empodere el patrimonio cultural.
Durante la cuarentena, el turismo fue uno de los sectores más golpeados. Con los estados financieros en cero, las iniciativas turísticas sufrieron un impacto negativo. En el Amazonas, por ejemplo, las agencias de turismo comunitario empezaron a comercializar osos de peluche en material reciclado para generar ingresos.
El vicepresidente de la RNTC, Davis Armando Ruiz, explicó que en el aislamiento, desde la Red apoyaron con campañas de donaciones, conversatorios y eventos para mostrar algunos de los destinos que empezarán a reabrir sus puertas. La expectativa es alta.
Junto con la Cámara Colombiana de Turismo y AgroSena Valle, las diferentes iniciativas pertenecientes a la red recibieron capacitaciones para el uso de protocolos de bioseguridad y una contextualización de lo que será el “nuevo turismo”.
Si bien hay ciertos lugares con la aprobación en los protocolos de reapertura, Davis recalca que cada territorio tiene condiciones particulares para la recepción de turistas. Invita a comunicarse directamente con cada iniciativa antes de visitarla. Y, sobre todo, a mantener el respeto por la tierra, la comunidad, las tradiciones y la vida.
“Los colombianos podemos apoyar al turismo comprando local. Es tanta la riqueza que tiene nuestro país, que podemos visitar nuestras propias comunidades y dejarles un aporte. El modelo de turismo comunitario invita a la articulación territorial a través de la participación de actores locales. Colombiano apoya a colombiano”
Aseguró Davis.
Bogotá: un viaje a la cultura de los cerros orientales
Vista panorámica desde el cerro Santa Ana. © Cortesía: archivo Sofía lópez
En medio del paisaje urbano que caracteriza la capital, hay diversas alternativas naturales que permiten conectar al turista con los cerros orientales y sus barrios tradicionales. En el proceso de reapertura, están disponibles dos iniciativas que lo llevarán a conocer la “cara verde y humana de Bogotá”.
Una de ellas es el Cerro Santa Ana, un paisaje natural y cultural sobre la reserva Bosque Oriental. Con tres tipos de senderos, expertos y aficionados podrán subir el cerro donde se alzan las torres repetidoras.
El recorrido inicia desde la carrera séptima y termina a 3100 metros sobre el nivel del mar. Allí, los turistas conocerán el bosque Altoandino, podrán recorrer la parte media de la montaña y llegar hasta el mirador, donde verán la chorrera de Usaquén, una cascada escondida en medio del paisaje bogotano que refleja la dinámica de los cerros y las comunidades que ahí habitan.
La segunda iniciativa es el recorrido por la zona rural de Usme. En la vereda El Destino se encuentra el embalse de La Regadera. Allí, entre tazas de aguapanela, arepas hechas en leña y queso propio de los campesinos, los turistas podrán visitar el embalse, las trampas de niebla y subir hasta la vereda Curubital. Además, conocerán los esfuerzos de la comunidad por la restauración ecológica.
Cada trayecto tiene estrictos protocolos de bioseguridad. Antes de acudir a los espacios, los visitantes deberán llenar una ficha médica donde asegura no tener ninguno de los síntomas de la Covid-19. Para minimizar el impacto, los grupos no serán mayores a 8 personas. Habrá gel antibacterial y zonas de desinfección. El uso de tapabocas es obligatorio.
Puede conocer más sobre estos recorridos en @tissusturismocomunitario , en instagram.
Quebrada las delicias ©Cortesía: archivo Sofía lópez
Embalse La Regadera, Usme ©Cortesía: archivo Sofía lópez
Lejanías, Meta: las 5 maravillas del Güejar
Como una iniciativa familiar, un grupo de campesinos “empoderados” -como se autodenominan- ofrecen todo tipo de actividades que involucran al principal recurso hídrico de la región: el río Güejar.
En el municipio de Lejanías los turistas podrán acceder a jacuzzis naturales, piscinas dentro del río, visitar la cascada Lajón, lanzarse desde un tobogán natural y conocer la cascada Caño Jordán.
Todos los recorridos son acompañados por un ‘Baquiano’, un joven local, experto en el tema, que guiará a los turistas durante su visita.
Piscinas de agua natural en el Río Güejar | ©Instituto de turismo del departamento del Meta
El sector cuenta con las medidas de bioseguridad recomendadas por la oficina de turismo. Antes de la visita, los turistas deben hacer la reserva. Así aseguran el correcto manejo de los grupos, distanciamiento social y control de aglomeraciones. Cupos limitados.
Los paquetes turísticos incluyen el almuerzo, la entrada a los cinco lugares, una póliza de asistencia médica y el guía correspondiente.
Puede conocer más sobre estos recorridos en @maravillas_del_guejar, en instagram.
Juan de Acosta, Atlántico: tejiendo ilusiones
Taller de artesanías | © Cortesía: @arteytejidooficial
En el corregimiento de La Chorrera, al sur del Atlántico, se encuentra uno de los lugares con más historia del departamento. Hay todo tipo de recorridos a disposición de los visitantes que le permitirán conocer de cerca la cultura ancestral propia del sector.
En el lugar, 140 artesanos producen y comercializan mochilas elaboradas en Croché. Allí, el turista tiene la oportunidad de ser artesano por un día, y conocer la historia del proyecto, ver y palpar el proceso productivo y elaborar una pieza tejida que podrá llevarse como recuerdo.
También podrá hacer un recorrido por la orilla del arroyo que rodea el pueblo y conocer el árbol milenario de Sanaguare. Es una experiencia extraordinaria ambientada por los relatos e historias vividas por los ancestros de la región.
Puede conocer más sobre estos recorridos en @arteytejidooficial, en instagram.
Arauca, Arauca: inmersos en la cultura llanera
Esta zona de la Orinoquía, donde el turismo genera ingresos para 50 familias asociadas de Arauca y Arauquita, se posiciona como un destino diverso y atractivo. La Asociación Red de Turismo Comunitario de Arauca (TUREDCO) agrupa ocho iniciativas de ecoturismo encargadas de prestar servicios, operar toures y promocionar el turismo de naturaleza en el municipio.
1.Avistamiento de Aves- Arauca Birding
2.La experiencia del trabajo en el llano- Finca Campoalegre
3.De árbol del cacao a la barra de chocolate- Finca Villa Gaby
4.La experiencia Cacaotera-Finca Kakauá
5.Avistamiento de Toninas- Barcaza del río Arauca
6.Artesanías tradicionales a través del Citytour
Avistamiento de aves | © Cortesía: Agencia Anvitur
La mayoría de las experiencias estarán disponibles a partir del primero de octubre. La asociación manejará un gran protocolo de bioseguridad que replantea algunas actividades y ubica zonas de lavado de manos/desinfección a lo largo del recorrido.
Puede conocer más sobre estos recorridos en @araucaunica, en instagram.
Bocagrande, Tumaco: una mirada al pacífico colombiano
Avistamiento de ballenas jorobadas | © Cortesía: Asobocagrande
A 25 minutos de Tumaco se presencia uno de los mayores espectáculos del pacífico colombiano: el avistamiento de ballenas jorobadas, que llegan a estas aguas para parir y criar a sus crías. Este destino es amenizado por los sonidos de la marimba y los cantos autóctonos.
Asobocagrande brinda a sus visitantes un circuito basado en la gastronomía ancestral de la región, así como experiencias culturales que articulan grupos folclóricos propios del territorio.
Con el objetivo de rescatar los saberes ancestrales y tradicionales, las experiencias que ofrecen al turista incluyen recorridos por manglares y senderos que permiten el avistamiento de aves playeras, así como toda clase de fauna y flora originaria del pacífico colombiano.
“Noches de bocagrande, bajo la luna plateada” como dice el famoso bolero colombiano, crean una experiencia cuasi mística, en la que los visitantes al son del Currulao y frente a la luz de una fogata, viven una noche cultural inolvidable.
Para el proceso de reapertura, quienes deseen visitar Bocagrande deben realizar una reserva previa y otorgar información médica donde aseguran que no han tenido síntomas sospechosos en los últimos 15 días. En el lugar realizan toma de temperatura y procesos de desinfección.
Puede conocer más sobre estos recorridos en @asobocagrande, en instagram.
En Puerto Rico (Meta), uno de los municipios más golpeados por el conflicto, quince jóvenes se unieron en un colectivo audiovisual para narrar y construir la transformación de su pueblo.